Siete estudiantes se certificaron como buzos
La actividad realizada del 12 al 17 julio pasado en Santa Marta, hace parte del plan de estudios de la licenciatura en Educación Física, Recreación y Deporte.
Quien lideró este espacio de formación fue el docente Mauricio Poveda, un hombre experto en la temática y que tiene certificados como buzo de aguas abiertas, avanzado, de rescate y dave master. “El objetivo es que vivan una experiencia única, ya que el núcleo temático de nosotros se llama deportes acuáticos. Para tal fin es que organizamos esta actividad cada semestre para los estudiantes de octavo de Fusagasugá que cursan la licenciatura. Ellos se organizan y viajamos a Santa Marta a realizar el curso que consta de seis inmersiones y las clases formales. Después deben presentar el respectivo examen de conocimientos y obtener el certificado de buzo de aguas abiertas el cual pueden mostrar en cualquier parte cualquier parte del mundo para practicar el deporte o hacer otros niveles”.
Pero previo al viaje al Caribe, los estudiantes debieron hacer un proceso de formación en piscina. “A esto se le llama capacitación en aguas confinadas y se hizo en la piscina del CAD. Allí vieron como es el buceo en la superficie y en lo subacuático, la respiración, el uso de la careta, las aletas y el snorkel, entre otros temas. Es bueno anotar que este proceso también hace parte del núcleo temático de la electiva de natación”.
Y es que el esfuerzo financiero que cada estudiante hizo fue grande. “El curso certificado tuvo un costo de un millón de pesos más lo que es alojamiento, alimentación y transporte que salió por 800 mil pesos aproximadamente. Fueron seis días y seis inmersiones en total. Lo interesante de todo este proceso es que nuestro futuro profesional obtiene una nueva faceta más allá de las tradicionales con las que suele salir al competido mercado laboral”.
Para la estudiante Dana Alejandra Bello Salinas, esta experiencia “fue increíble porque pude conocer el mar buceando gracias a la motivación del docente Mauricio. Yo vi la clase y la electiva de natación y haber ido a Santa Marta, me ayudó muchísimo a superar los miedos en cuanto al manejo de todo el equipo de buceo, la forma correcta de respirar bajo el agua y la tranquilidad que uno debe tener para bajar dieciocho metros. Aprendí muchas cosas”.
Y es tanta la motivación con el que llegó del viaje, que este proceso para ella no llega hasta ahí. “Mi intención es seguir buceando para obtener otras certificaciones hasta convertirme en profesional. Lo interesante es que somos licenciados y tenemos las herramientas pedagógicas para enseñar este bello deporte. Eso es algo que me gustaría hacer a futuro. ¡Nunca voy a olvidar esta experiencia!”.
Entre tanto, para su compañero Johan Sebastián Gómez quien cursa noveno semestre de la licenciatura, este proceso de aprendizaje del buceo le dejó importantes enseñanzas. “Para mí fue interesante aprender sobre este deporte y me gustaría aprender más sobre el buceo. Ahora tengo un emprendimiento de una agencia de turismo en deportes de aventura y este tema en particular me gustaría tenerlo como una opción para los futuros clientes”.
De esta manera la Universidad de Cundinamarca forma estudiantes bajo la premisa del MEDIT que habla educar una persona transhumana, para la vida, los valores democráticos, la civilidad y la libertad en donde se pasa de una educación para el hacer y el trabajo a una para el ser.