Socialización de la estructura presupuestal

El evento se realizó el 25 de octubre por Facebook Live, y tuvo como objetivo mostrar en qué se invertirán los recursos el año entrante. 

La reunión inició con una pormenorizada exposición a cargo de la doctora Myriam Lucía Sánchez Gutiérrez, vicerrectora Administrativa y Financiera, quien resaltó que, para la elaboración de este presupuesto, se tuvieron en cuenta aspectos como: metodología y parámetros generales para la elaboración del presupuesto 2023, los ingresos, los gastos, el plan operativo anual de inversiones y los fondos especiales. 

Para el cumplimiento de esta importante tarea, se debió, según la doctora Myriam Lucía, “hacer unos lineamientos, previo aval de planeación, después realizamos un acompañamiento del catálogo de elaboración presupuestal de acuerdo a las necesidades. De ahí se pasó a la proyección de las mismas, con los respectivos ajustes. Después se estructuró un cronograma para cada proyecto de inversión con las distintas áreas con base en sus necesidades y acto seguido, se les dijo qué se priorizó. De ahí se pasó a la revisión por parte del cuerpo de colegiados, antes de enviarlo al consejo académico y superior para su aprobación. Una vez surtida esta última fase, se proyectó la resolución de liquidación del presupuesto, para cargarlo en el sistema, con el fin de que, a partir del 2 de enero de 2023, se puedan expedir solicitudes de certificado de disponibilidad presupuestal (CDP)”. 

Es así, como para los criterios de estimación del gasto, se manejó la variable del valor ejecutado en el 2022 más el incremento correspondiente. “Luego se hizo la proyección de este, teniendo en cuenta los últimos tres y cinco años. También se tuvo presente el incremento salarial más el IPC, la cantidad de personal requerido en cada una de las oficinas, el funcionamiento de las extensiones y sedes, el salario mínimo y el sueldo de los servidores públicos, entre otros indicadores”. 

Por su parte, la doctora Aida Lucía Toro Ramírez, directora de Planeación Institucional, quien realizó una estimación de ingresos del presupuesto general que tendrá la universidad explicó que las fuentes vienen de recursos propios que ascienden a 29.780 millones de pesos. “Además, tenemos lo destinado por Ley 30, artículo 86, que suma, 38.167 millones de pesos: por Ley 30, artículo 87, 1.844 millones de pesos; por devolución de IVA, 2714 millones de pesos; por devolución de votaciones, 1.459 millones de pesos; por Ley 30, artículo 86, Plan de Fomento Institucional, la cifra es de 2.650 millones de pesos; por el programa de acceso y permanencia a la educación superior, 2.326 millones de pesos. Aportes del departamento, 42.153 millones de pesos; por la estampilla ProUdeC, 2.297 millones pesos; por la estampilla estatal, 2.102 millones de pesos; por rendimientos financieros, 1.081 millones de pesos y por recurso del balance que tiene destinación específica de segunda fase de Zipaquirá son 7.000 millones de pesos, para un total de ingresos para el 2023 de: $133.578.918.177”. 

Así mismo, efectuó un detallado análisis de gastos sobre la base de los rubros de personal, contribuciones inherentes a la nómina de planta, contribuciones inherentes a la planta temporal, funcionamiento, transferencias a los fondos. “Esto suma un total de $113.909.645.121”, dijo la alta funcionaria. 

También realizó un análisis de los dos tipos de inversión que realizará la UCundinamarca. “Tenemos la misional con un gasto de 8.443 millones de pesos y la institucional, con 11.126 millones de pesos, para un total de 19.669 millones de pesos para el 2023”. 

Para el año entrante, según la doctora Aida Lucía Toro, se han priorizado inversiones que fomentan la actividad académica. “Para destacar, los de practica académica, en donde se invirtió en transporte, peajes y parqueaderos para docentes y estudiantes cuando requieran desplazamientos”. 

Como novedad, la funcionaria hizo un importante anuncio, al asegurar que se le dará mayor autonomía a las sedes y extensiones en la ejecución de sus recursos de acuerdo a sus necesidades. “Lo que se desea es que no tengan que depender de Fusagasugá para dicho proceso. Ahora solo deben tener presente toda la reglamentación vigente que hay para adelantar esos procesos”. 

Además, brindó una explicación de los ciclos de vida para la gestión de los proyectos de inversión en la UCundinamarca y aseguró que “desde mi despacho, se realiza un seguimiento semanal de los mismos, para que, de esta forma, se puedan visualizar los riesgos y de esta manera, establecer una estrategia de mitigación”. 

Para concluir su exposición, resaltó en este trabajo, el engranaje que hubo con la Vicerrectoría Administrativa y otras instancias de la alta dirección de la universidad, con el fin de lograr una ejecución eficiente y eficaz de los recursos para llevar a la UCundinamarca hacia la Acreditación Institucional.