El sueño de ser Ingeniero de Sistemas

“El ingeniero de sistemas es integral, crítico, reflexivo, creativo, emprendedor, investigativo, e innovador”, expresó Brayan Camilo León Torres.

Apasionado por la informática, defensor de las mujeres y del medio ambiente es Brayan Camilo León Torres, un joven estudiante de segundo año del programa de Ingeniería de Sistemas, extensión Chía.

A sus 20 años de edad sueña con fortalecer las relaciones bilaterales entre Colombia y Brasil. Su tesis de grado la proyecta hacia la creación de un “Banco de Datos Municipal Colombo-Brasileño (BANDAMUNICOLBRAS)”, dedicada al almacenamiento, modificación y extracción de la información general y de contenido multimedia de los 1.102 municipios que tiene Colombia y de los 5.570 municipios que conforman Brasil.

El objetivo de su tesis es proporcionar información a nativos y turistas que quieran conocer detalladamente cualquier municipio colombo-brasileño de manera exacta, actualizada, oportuna, integrada, ordenada y creativa.

Para conocer un poco más de Brayan Camilo, la UCundinamarca entrevistó a este joven estudiante de personalidad espontánea, alegre, inteligente, soñador y de mente brillante para almacenar datos geográficos universales.

UCundinamarca: ¿Por qué decidiste ingresar a estudiar en la Universidad de Cundinamarca?

Brayan Camilo León Torres: En el año 2015 obtuve mi título de bachiller académico y emprendí mi expedición universitaria para cultivar mi semilla dorada de la Ingeniería de Sistemas. Inicié mi valiosa vida universitaria en la Universidad de Cundinamarca (extensión Chía), a inicios del 2016, teniendo en cuenta que actualmente vivo en la ecológico-campestre vereda Yerbabuena del municipio de Chía, junto con mi familia conformada por mi madre, mi padre y mi hermano mayor.

Quiero resaltar que me enteré de esta universidad en la versión No. 28 de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, en Corferias. Buscaba una Institución cerca donde resido, y por este sector hay dos reconocidas universidades: la Universidad de la Sabana (privada) y la Universidad de Cundinamarca (pública). En la Unisabana la Ingeniería Informática el costo era supremamente alto, haciendo que no tuviera más remedio efectivo que inscribirme en la Universidad de Cundinamarca, Institución que hoy está bajo la vanguardia del Siglo 21, y cuyo costo fue y es óptimo para mi familia.

Así me convertí felizmente en un estudiante más de Ingeniería de Sistemas de esta regocijada familia universitaria, Generación Siglo 21”, la cual quiero con todo mi corazón.

UC: La Universidad en los últimos años se ha fortalecido en infraestructura y academia. ¿Qué opinión tiene de este avance?

BCLT: Una vez ascendido el abogado Adriano Muñoz Barrera como Rector bajo el lema de “Generación Siglo 21”, la Universidad ha experimentado cambios increíbles en sus ámbitos y acorde a la época en que hoy vivimos como seres humanos en sociedad. Se destaca el ámbito académico, la incentivación de la cultura de “dialogando con el mundo”, que consiste en la internacionalización de nuestros compañeros “Udecinos” en diferentes universidades reconocidas que tienen convenios internacionales con nosotros.

Considero que estos convenios de movilidad académica ayudan a fortalecer en los estudiantes sus habilidades intelectuales en inglés, francés, alemán, italiano, japonés, portugués, entre otros idiomas; y así como conocer diversas culturas y costumbres de otros países.

UC: ¿Qué ha podido percibir de las instalaciones de la extensión de Chía?

BCLT: La inauguración de estas instalaciones campestres me permite, además de poder estudiar motivado y cómodo, estar relajado y en paz interior, especialmente en la biblioteca. He podido saber que se tiene planeada la construcción de una extensa sede en la ciudad de Zipaquirá, lugar donde la Universidad de Cundinamarca ofrece el programa de Música.

UC: Usted que ha escogido la educación pública ¿cómo percibe el tema de recursos y transferencias que reclama la UCundinamarca al Estado?

BCLT: Cabe destacar el endeudamiento del Estado colombiano hacia nosotros, es decir, la transferencia de los recursos de los años 1993 y 1994. Mis compañeros y yo reclamamos a favor del pacto de cumplimiento por parte del Estado para que se pague a la Universidad de Cundinamarca las transferencias de esos años, así como el reajuste de la base de transferencia a fin de garantizar el servicio público educativo.

UC: ¿Qué le ha enseñado la Universidad en estos semestres de estudio?

BCLT: Durante este corto tiempo de regocijada vida universitaria he cursado materias nobles, regulares, y difíciles. La experiencia en esta área me ha llevado a realizar ejercicios de tablas (matemáticas) de verdad, a convertir números decimales a binario, octal y hexadecimal, a construir programas en modo gráfico y árboles de datos, a explorar los interesantes requerimientos útiles en los sistemas de información. Por ahora, voy en la mitad de este camino hacia mi sueño de convertirme en ingeniero de sistemas profesional egresado de la “Universidad de Cundinamarca, Generación Siglo 21”.

UC: ¿Cuál fue ese momento o situación que hizo decidirte por la Ingeniería de Sistemas?

BCLT: Todo comenzó en el año 2008, cuando estaba en quinto de primaria. Óscar Bello se convirtió en mí profesor de Informática. Él hizo que me emocionara con la informática. Durante aquel año todos los días me dedicaba a cultivar mi talento de usar fluidamente el computador, el aparato innovador e inteligente que cambió mi vida para siempre.