Graduado impulsa salud natural con su farmacia

 

Tras seis años de formación en la UCundinamarca, Mario Alejandro Rodríguez no solo se llevó conocimientos técnicos, sino también experiencias significativas con Gestores del Conocimiento y el Aprendizaje, compañeros y personal administrativo que marcaron su camino. “Ser graduado de la Universidad de Cundinamarca me ha abierto muchas puertas a nivel profesional”, asegura con orgullo.

 

Su emprendimiento, la Farmacia Natural Arcángel Rafael, nació antes de su paso por la universidad, pero fue durante sus estudios cuando encontró las herramientas necesarias para fortalecer y expandir su negocio. “Empecé a estudiar precisamente por las necesidades del emprendimiento. Hoy contamos con dos sedes, una en Ubaté y la otra en Simijaca, cinco colaboradores y un consultorio médico donde mi esposa ejerce su profesión”, cuenta.

 

Uno de los mayores retos que enfrentó fue durante la pandemia. La incertidumbre económica golpeó fuerte, pero Mario no se detuvo. Se reinventó con servicios en línea y domicilios, demostrando que la resiliencia es clave en el camino del emprendedor. “La universidad me dio las bases para afrontar cualquier dificultad del entorno administrativo”, afirma.

 

A los futuros emprendedores y estudiantes les deja un mensaje claro: “Siempre habrá dificultades, pero hay que luchar por los sueños. El miedo y las limitaciones económicas estarán presentes, pero si uno persiste y sueña en grande, todo es posible”.

 

La historia de Mario es testimonio del impacto que tiene la educación superior cuando se conecta con el territorio, los sueños personales y las realidades del emprendimiento en Colombia.

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