Graduada emprendió con un negocio de postres

Ingrid Johanna Páramo, de administración de empresas de la seccional Girardot, hoy tiene dos locales ya acreditados en tan solo un año. ¿Cómo lo Logró?

Por: Juan Carlos Monzón. Oficina Asesora de Comunicaciones

Y es que gracias a la formación académica que recibió en donde se le enseñó a investigar, emprender y a ser conocedora de su entorno para lograr una transformación social, base del Modelo Educativo Digital Transmoderno, es que esta joven creó Bendito Pecado en Girardot. “Lo fundamos hace más de un año, un día se me ocurrió vender a amigos y familiares postres a domicilio, fue así como me di cuenta de que a la gente le agradaba mucho el producto; por eso con mi esposo arrendemos un local y creamos la empresa dedicada a dicho sector gastronómico”.

El lugar escogido fue en el barrio Blanco, allí abrió su local en un espacio de diez metros cuadrados; pero no querían caer en lo tradicional, así que después de muchas pruebas y errores lograron inventar un arroz de leche único, lo cual se ha convertido en un diferencial importante que sus clientes valoran. “Es nuestro producto estrella, es cremoso y de buen sabor al paladar, no hay nada similar en la región. No fue fácil, pero logramos estandarizar la receta, tras un mes de ensayos en donde nuestros familiares fueron nuestros sujetos de prueba y quienes nos iban dando su opinión para mejorar”.

De eso ya ha transcurrido un año. “Nos fuimos dando a conocer, tanto así, que nos invitaron a un festival de hamburguesas en donde nuestro producto estrella gustó mucho a los comensales. Ese primer triunfo lo hemos combinado con una estrategia digital usando redes sociales como Instagram y Facebook en donde influenciadores nos han visitado, nos han ayudado a dinamizar estos medios y a difundir el negocio con sus comentarios positivos”.

Ahora venden también fresas con crema, merengones, torta genovesa, de tres leches, esponjados de Maracuyá y su local permanece lleno. “Abrimos de lunes a viernes de 9:00 am a 8:30 pm y los sábado de 2:30 pm a 9:30 pm, aunque los fines de semana son los de mayor concurrencia. El éxito ha sido grande y por eso

nos animamos a abrir otro local en el barrio Buenos Aires. Ya no somos solo mi esposo y yo, sino que tenemos en total, doce empleados”.

Sobre el dilema de los recién graduados de crear empresa o emplearse, Ingrid Johanna piensa que esta primera opción es la mejor. “A veces buscar trabajo no es sencillo, así que emprender es una buena opción. No obstante, sé que crear un negocio en Colombia no es fácil. Mi recomendación es que sean disciplinados en la calidad del producto, en el manejo del dinero y que persistan en la búsqueda de su sueño”.

Y como toda empresa, esta tiene su visión: “Queremos en los próximos años poder abrir un local en Bogotá y después en la costa, ya que nuestro producto lo han llevado para allá y la gente ha quedado muy contenta por su calidad. También nos gustaría algo en La Mesa o Anapoima, pues tenemos muchos clientes que vienen de esos municipios”.

Cuando se le menciona la UCundinamarca y lo que representa en su vida, esta emprendedora solo tiene palabras elogiosas. “Le agradezco que tuve muy buenos docentes que me dieron las bases de mercadeo, publicidad y contabilidad que me sirvieron para emprender para que esto sea una realidad”.

Así es como esta emprendedora que hace poco decidió empezar en un pequeño local, hoy tiene un negocio próspero que genera empleo y en el que sueña con seguir creciendo.

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