Diálogo de saberes, estrategia para “conectarse más”

Carlos Hernando Forero trae algunas ideas – recomendaciones para que, en palabras del ministro Gaviria, las universidades “se conecten más”.

El ministro de Educación de Colombia, Alejandro Gaviria, ha expresado en diferentes foros, preocupaciones centrales sobre la educación superior, relacionadas con una reforma integral a la ley 30 de 1992, una revisión de fondo al sistema de aseguramiento de la calidad, un mayor papel de las IES en los ecosistemas regionales, el papel del sector en la consolidación de la paz y otras iniciativas de hondo calado. Particularmente ha señalado que: “las universidades deben conectarse más” y considerar la transformación de los mercados de trabajo.

La función sustantiva de la extensión universitaria tiene soportes conceptuales en la integración, e interacción y el diálogo de saberes, reconociendo que además del saber académico y científico, existen saberes estructurales de grupos organizados, saberes populares y ancestrales. Por lo tanto, ese vínculo de las IES con su entorno y con otros sectores de la sociedad (las IES hacen parte de la sociedad) debe darse sobre el reconocimiento mutuo en un diálogo de saberes donde también se aprende y se ponen a tono las otras funciones sustantivas de la formación y la investigación; generando una dinámica positiva que rompe inercias y es fuente de inspiración para procesos innovativos. Cuando se reclama mayor conexión de las IES, se abre la posibilidad de introducir cambios en el sector para responder de una mejor manera a los desafíos y retos de nuestras sociedades.

Si examinamos críticamente las agendas de ciertos espacios institucionales de la educación superior, para establecer el tiempo y la intensidad para ocuparse de un diálogo de saberes, mucho me temo que salimos mal librados y nos vemos absorbidos casi totalmente en nuestras propias angustias, buena parte de ellas para atender el pasado y el corto plazo sin proyección estratégica de país. Pensemos en las agendas del CESU, del CNA, consejos superiores y directivos de las IES, asociaciones de IES a nivel nacional y regional.

Algunos ejemplos de saberes estructurados, construidos colectivamente y pensando en los próximos años son.

Documento COMFECAMARAS, 2022 – 2026, Plan nacional de desarrollo. Que contiene unas propuestas y metas para el cuatrienio, donde se encuentran temas directamente relacionados con la educación superior, como son:

Propuestas en materia de competitividad y desarrollo empresarial

1. Emprendimiento y formalización
2. Productividad y capital humano
3. Innovación y sofisticación
4. Acceso a mercados
5. Equidad de género
6. Articulación institucional para la competitividad

Metas

1. Formalizar 300.000 unidades productivas, que representan alrededor del 20% de los micronegocios con potencial de crecimiento
2. Dinamizar el aparato productivo, generando 400.000 nuevos empleos para los jóvenes
3. Incrementar en $2.3 billones el valor de nuevos productos y servicios con base en investigación, desarrollo e innovación
4. Recibir US$1.000 millones adicionales en los flujos trimestrales de IED, que representan cerca del 4% del PIB trimestral.

Un segundo ejemplo es la agenda de un grupo de 6.400 empresas, 3,5 millones de empleados, con presencia en el 90% del país, denominado ALIADAS, Asociación de empresarios; que realizan planteamientos sobre sus 5 prioridades, donde se hace evidente una relación con el papel de la educación superior.

1. Infraestructura tecnológica y transformación digital
2. Talento y empleabilidad
3. Sostenibilidad y cambio climático
4. Regulación y estabilidad jurídica
5. Perspectivas tributarias

La propia CEPAL, sobre un tema central como es el vínculo universidad empresa, ha publicado textos donde expresa los puntos fundamentales al respecto.

CEPAL. Universidad – Empresa, Comunidades temáticas:

• Parques tecnológicos
• Universidad emprendedora
• Triple hélice
• Canales de transferencia
• Perspectiva geográfica
• Innovación abierta

En esa perspectiva de “conectarse más”, aparecen los resultados de las reflexiones de expertos nacionales e internacionales, sobre temas centrales para el desarrollo del país. Los gobiernos tienen la costumbre de conformar, MISIONES, para examinar temas como: Ciencia y tecnología (“sabios”), internacionalización (con fuerte crítica al sistema de innovación), empleo (no hemos podido superar la informalidad), tributaria (en estos días tan en boga), mercado de capitales (atracción de inversión), rural (esencial para la paz) y otras más. Los documentos son de gran riqueza y cualifican los debates para encontrar las mejores estrategias y su puesta en marcha.

En general los cuerpos directivos de la educación superior en diferentes niveles no tienen en su agenda la revisión y establecimiento de vínculos con los planteamientos de las MISIONES para definir un trabajo colectivo (interrelación e interdependencia) del cual se vería beneficiado el país y sería más evidente ante el público el papel de la educación superior y sus instituciones.

Podríamos citar otros ejemplos de organizaciones sociales preocupadas por pensar el país y sus regiones, y establecer una hoja de ruta para la concreción de acciones y soluciones. Ojalá el diagnóstico del ministro permita replantear las agendas y los métodos de trabajo de los órganos de gobierno del sector a nivel nacional y regional, para que el país se beneficie y se obtengan mayores grados de legitimidad social; en la seguridad que de ese dialogo de saberes podrán salir muchas transformaciones de la educación superior, tan necesarias si queremos un mejor futuro.

Esto por fortuna, en pequeña escala, se está dando a nivel regional y puede ser una semilla para potenciarlo con buenas políticas públicas, fundadas en el paradigma del “Estado promotor” y sustentadas en experiencias regionales.

En los ecosistemas regionales se intenta funcionar con una nueva institucionalidad, que sirve para que las IES lideren y se conecten más. Espacios como las comisiones de competitividad, de los comités universidad-empresa-Estado, de los planes de desarrollo locales y regionales, de comités sobre la internacionalización. Allí es propicio el dialogo de saberes y la definición de trabajos conjuntos con una mayor sinergia en favor del desarrollo territorial.  En esta interacción e interdependencia las IES derivan aprendizajes transformadores que las pueden llevar, por ejemplo, a replantear el modelo pedagógico y didáctico, reformular la agenda investigativa y atender de manera innovadora las necesidades del entorno en un ejercicio de asociatividad.

Fuente: El Observatorio de la Universidad Colombiana