
Una mirada hacia la gran cuenca hidrográfica del Amazonas
Los recursos hídricos en el medio ambiente: Cuencas transfronterizas, cuenca Amazónica, fue la conferencia organizada por la Maestría en Ciencias Ambientales, que contó con presencia de la doctora Claudia Daza Andrade como invitada especial, desde la Universidad Federal Rural de Rio de Janeiro, Brasil.
La ingeniera civil Daza con maestría y doctorado en Ingeniería Civil en el área de Recursos Hídricos y sanamiento ambiental de la Universidad Federal de Rio de Janeiro y quien, actualmente, trabaja en el departamento de ingeniería de dicha universidad como profesora adjunta, advirtió que es fundamental cuidar los recursos hídricos del planeta para asegurar la vida de todas las especies que habitan en él.
Indicó que Brasil, Rusia, Canadá, China, Indonesia, Estados Unidos y Colombia, son los siete países privilegiados que cuentan con la mayor cantidad de agua dulce del planeta, aproximadamente, el 50%. Los países restantes comparten el otro 50%, y de este porcentaje 92 de ellos poseen sólo el 5% de esa cantidad de agua. Estas cifras indican la desigualdad tan abismal que existe en la distribución de este recurso valioso para la vida en el mundo.
También aseguró que ya existen países que sufren de escasez o estrés hídrico como los del norte de África, los de Oriente Medio y Sudáfrica, y muchos otros (los ubicados en el resto de África, Suramérica y Asia), aunque cuentan con este valioso recurso no tienen medios económicos para proveer de agua potable a sus habitantes.
En cuanto a los recursos hídricos transfronterizos afirmó que son aquellos que se encuentran o funcionan en las fronteras, que cruzan los límites entre territorios y no se pueden separar por divisiones políticas y administrativas, y que de ahí la importancia de establecer acuerdos y tratados multinacionales, con los cuales se puedan manejar, de forma adecuada, dichos recursos para evitar posibles conflictos entre los países que los comparten.
“En la actualidad hay aproximadamente 263 cuencas hidrográficas compartidas por dos o más países, las cuales corresponden al 60% de toda el agua dulce disponible en el planeta. De esta cantidad 38 de ellas se encuentran en América del Sur”, indicó la doctora Daza.
Con respecto a la cuenca del Amazonas, afirmó que tiene más de 6 millones de km2 y la comparten ocho países: Brasil, Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú, Bolivia, Guyana y Surinam. Un dato preocupante que reveló es que dicha cuenca ya perdió 295 mil Km2 de floresta o paraje selvático, entre los años 2000 y 2017; esta extensión equivale al territorio de Ecuador, es decir, el 20% de su tamaño total, y que si se completa el 25%, la floresta se va a tornar reseca y apta para incendios, lo cual ya se comprobó con los monumentales incendios presentados el año pasado, que dejaron pérdidas incalculables en esta reserva ambiental.
Los tratados de dicha cuenca se iniciaron con una declaración de demarcación de fronteras entre Ecuador y Perú en 1944, le siguieron los de 1978 en el que se hizo la declaratoria de la cuenca Amazónica y en la que participaron los ocho países que la conforman; posteriormente se firmaron los de 1984 y 1988 que hacían referencia a la construcción de la hidroeléctrica en Cacho Esperanza, en Bolivia, pero que no se llevó a cabo, lo cual fue acertado a juicio de la especialista, pues iba a destruir muchos ecosistemas de la región.
La firma de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) en 2003, fue uno de los más importantes ya que dicha organización trabaja con los pueblos indígenas amazónicos en la conservación de este vital recurso. La otra iniciativa, muy importante en estos momentos, es la conocida como MAP, que involucra la región comprendida entre el río Madre de Dios y el Pando y que está ubicada entre Bolivia, Perú y Bolivia.
Conclusiones
La doctora Daza aseguró que para conocer la real situación de la cuenca Amazónica son indispensables las informaciones hidrológicas y ambientales, pues a partir de ellas se pueden detectar los fenómenos ambientales que suceden en ella y en sus ecosistemas.
Así mismo indicó que es fundamental la disponibilidad de datos e iniciativas de intercambio entre las instituciones académicas que trabajan por la cuenca para trabajar de manera mancomunada y lograr su preservación.
Por último dijo que debe haber un desarrollo local transfronterizo basado en la cooperación de las personas e instituciones que habitan la cuenca y que la firma de tratados es imprescindible para evitar conflictos entre los países que la comparten.
El evento transmitido por la plataforma de Facebook Live de la UCundinamarca contó con la participación de asistentes de México, Chile, Brasil y Colombia.